Comunicado de Anabad Cantabria en relación a las quejas de la comunidad de estudiantes cántabros dirigidas a las bibliotecas públicas

Durante la última semana hemos podido leer tanto en prensa como en redes sociales, reclamaciones reiteradas de salas de estudio por parte de los estudiantes cántabros, cuyas quejas iban sistemáticamente dirigidas a las bibliotecas. Se pide a estos centros más aforo y horarios ampliados, incluso de 24 horas.

Por encima de la necesidad de señalar que las bibliotecas, en estos tiempos de crisis, han recibido más recortes que refuerzos presupuestarios, y que los recursos son extraordinariamente limitados, desde la UT ANABAD-Cantabria * queremos sobre todo destacar que se está obviando la función principal de estos centros, que no es otra que proporcionar información, documentación y recursos o servicios que permitan acceder a ella.

Recordemos la definición que el principal organismo internacional que representa los intereses de los usuarios, de los servicios bibliotecarios y de documentación, la IFLA (Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas) hace de biblioteca pública:

Biblioteca pública es una organización establecida, apoyada y financiada por la comunidad, tanto a través de una autoridad u órgano local, regional o nacional o mediante cualquier otra forma de organización colectiva. Proporciona acceso al conocimiento, la información y las obras de creación gracias a una serie de recursos y servicios y está a disposición de todos los miembros de la comunidad por igual, sean cuales fueren su raza, nacionalidad, edad, sexo, religión, idioma, discapacidad, condición económica, laboral y nivel de instrucción.

El concepto de biblioteca pública hace referencia al servicio público de que se dota la sociedad para garantizar que todos sus ciudadanos tengan, allá donde residan, la posibilidad de acceder en igualdad de oportunidades a la cultura, la información y el conocimiento. Este servicio debe entenderse como un sistema, como un conjunto interrelacionado de centros bibliotecarios que prestan servicio a una población determinada y constituye la puerta de acceso público más importante a la Sociedad de la Información.

En definitiva, al hablar de biblioteca pública se hace mención a las bibliotecas que están al servicio de una comunidad determinada, ya sea un barrio, un pueblo o ciudad, una comarca o provincia; que atienda a todos sus habitantes cualquiera que sea su edad o su dedicación, y por lo general de forma gratuita; cuentan con fondos sobre todas las materias; son al tiempo centros de información y centros culturales, fomentan la lectura y brindan apoyo a la educación formal y el autoaprendizaje, independientemente del organismo público o privado de que dependan.”

Las bibliotecas no son aulas a las que acudir a estudiar, no son lo mismo que salas de estudio, son mucho más y pretender convertirlas en ello es restringir su capacidad, empobrecerlas, limitar su desarrollo y por tanto el de las sociedades a las que dan servicio.

Es importante aclarar esta diferencia y como asociación que tiene por objeto fundamental promover el desarrollo y mejora de archivos, bibliotecas, museos y centros de documentación y de los servicios a ellos encomendados, en esta Comunidad, queremos ponerlo de manifiesto.

Evidentemente, las bibliotecas siempre van a recibir de buen grado a los estudiantes, pero no están ni dotadas ni pensadas exclusivamente para ellos, por tanto, creemos y requerimos que las demandas vayan encaminadas a habilitar más lugares para el estudio, no más bibliotecas y deslindar de una vez ambos conceptos.

UT ANABAD-Cantabria

*Federación de Asociaciones de Archiveros, Bibliotecarios, Arqueólogos, Museólogos y Documentalistas (ANABAD)